Petroglifo en la Sabana de Bogotá. ¿Hallazgo o fraude?

Diego Martínez Celis / RUPESTREWEB - Colombia

Durante una reciente visita a un conjunto de pinturas rupestres de la Sabana de Bogotá, Rupestreweb pudo constatar la existencia de un petroglifo que, solitario, parece desafiarnos con cuestionamientos sobre su autenticidad por un lado, o sobre los supuestos que tradicionalmente se han considerado en torno al arte rupestre de la región, por el otro.

Vista de la Laguna de la Herrera desde los Cerros de Usca	Pintura Rupestre de Los Cerros de Usca

Se trata de un único grabado antropomorfo inscrito en una pared vertical, a un kilómetro del conocido grupo de pinturas rupestres de los Cerros de Usca, en el municipio de Mosquera (Cundinamarca). Este hallazgo no deja de ser desconcertante, por cuanto este sitio ya habia sido reportado anteriormente (Broadbent1970, Cabrera1966-69, Botiva 2000) sin nunca mencionarse este grabado.

Si bien no se han realizado prospecciones sistemáticas en el área, la existencia de un grabado, cuestiona la tradicional presunción de que los petroglifos, en el altiplano, son propios de las tierras bajas que lo circundan y que mas bien es la pintura la manifestación rupestre por excelencia. Para el caso del sur occidente de la Sabana de Bogotá, este sería el primer grabado reportado.

Grabado rupestre o petroglifo hallado cerca a Los cerros de Usca.	Detalle.

Por otro lado surge la duda sobre su autenticidad, debido principalmente a que en los ultimos años se han presentado algunos casos en que académicos poco éticos realizan prácticas de experimentación con el fin de reproducir las técnicas de elaboración del arte rupestre. Es conocido el caso denunciado por en antropológo Alvaro Botiva quien, sin saberlo, terminó incluyendo en su libro Arte rupestre en Cundinamarca (2000), una pintura rupestre de Sutatausa que habia sido realizada en los años 90 por estudiantes de la Universidad Nacional a cargo de Guillermo Muñoz. Esta pintura fue realizada sobre una roca contigua a otra original, con materiales y motivos muy similares a los empleados por los indígenas, pero nunca se acompañó de un aviso que evidenciara su reciente factura ni se comunicó tal práctica a las entidades pertinentes (ICANH, Alcaldía municipal, etc).

El petroglifo de Mosquera está realizado sobre roca arenisca, y aunque no presenta claras huellas del tipo de instrumento utilizado, la coloración del surco, el cual es más oscuro que la superficie, podría indicar que su factura es reciente, pues de ser tan antiguo como los que se observan en el occidente del departamento, esta diferenciación no sería tan notoria. Cabe anotar sin embargo que por no conocer antecedentes genuinos de grabados sobre este específico tipo de roca de la zona, no sabemos como se comporta realmente el intemperismo sobre las áreas grabadas.

Hacemos pues un llamado, a los colegas que han trabajado en la región, a notificar si han realizado este petroglifo como una práctica experimental o bien a aportar con su experiencia y comentarios para esclarecer su autenticidad.

De ser genuino nos encontrariamos frente a una importante evidencia, clave para la reformulación de la distribución espacial y geográfica del arte rupestre colombiano. De no serlo, este podría ser otro triste ejemplo de las irresponsables y poco éticas prácticas de algunos "investigadores".

Octubre de 2004.

Cualquier información favor comunicarse al correo electrónico: rupestreweb@yahoo.com

REFERENCIAS:

Botiva, Alvaro. Arte rupestre en Cundinamarca. Gobernación de Cundinamarca- ICANH, 2000.

Broadbent, Sylvia. Reconocimientos arqueológicos de la laguna de "La Herrra". Revista colombiana de antropología Vol. XV, ICAN, 1970.

Cabrera Ortiz, Wencesalo. Monumentos rupestres de Colombia. Revista colombiana de antropología XIV, ICAN, 1966-69.

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