Entorno: obras rupestres, paisaje y astronomía en El Choapa,
Chile
Patricio
G. Bustamante Díaz bys.con@entelchile.net
Teléfono 56-2-7753574-7753574
Leonor de Corte 5548 Quinta Normal Santiago, Chile
Versión
preliminar presentada en el Taller de Arqueología del Choapa,
Universidad SEK, Septiembre 2004
I INTRODUCCION
Estudios realizados durante las
dos ultimas décadas en la localidad de Cuz Cuz (31°30-71°10),
ubicada a 6 kms. de Illapel, muestran que en este sitio 17% de los
petroglifos , 12% de las piedras de tacitas y 12 construcciones,
muestran relación con la observación de eventos astronómicos
y elementos del paisaje. Observaciones complementarias en El Coligüe
(31°12-71°18) y El Mauro (31°59-71°00),
muestran una relación entre obras rupestres y caminos, por
lo tanto con otros sitios lejanos. Es decir las obras rupestres
tienen relación con su contexto.
La relación entre obras rupestres
y el contexto en que están insertas, sugiere la necesidad
de introducir el concepto de Entorno en el estudio de los
sitios arqueológicos. Este concepto comprende el estudio
relacional de: a) Las obras, b) La Cultura, c) La Geografía,
d) La Astronomía, e) La Ecología. Debido al breve
espacio del artículo se presentan aquí solo algunos
ejemplos de estas variables.
II METODOLOGÍA
La orientación de las obras
es medida empleando una brújula, con lo cual es posible obtener
una precisión de _°. Para medir alineaciones de rocas,
accidentes del paisaje o muros con superficies irregulares, no se
requiere mayor precisión que _° (Belmonte 1999). Autores
como Sprajk (2001) en sitios ceremoniales de Mesoamérica
utiliza brújula prismática con precisión de
_°, pero esto es aplicable solo en el caso de muros perfectamente
lisos.
El cálculo de las salidas
y puestas de sol es realizado utilizando cartas solares de desplazamiento
polar (Steuven 1973: 31°30). La confirmación de
estos eventos y su relación con elementos del paisaje, es
realizada mediante la observación directa y el registro fotográfico.
La confirmación empírica permite apreciar detalles
como las formas de los cerros tras los cuales sale o se pone el
sol, detalles relevantes al momento de realizar una interpretación
del lenguaje visual empleado por los antiguos constructores (Bustamante
1996) (Bustamante et al 2003).
Con el objeto de registrar relaciones
entre obras rupestres, horizonte y eventos astronómicos,
éstas son fotografiadas de acuerdo con el siguiente procedimiento:
1) registro de vistas frontal, posterior, lateral izquierda, lateral
derecha y foto superior. En las fotografías se registra la
obra en relación al horizonte (Figura 7). 2) Desde
la obra se toma una secuencia de fotos del horizonte en 360°,
esto permite relacionarla con el horizonte circundante y con posibles
eventos astronómicos. 3) Una fotografía de la cara
superior del petroglifo (tacita, construcción o pictografía)
con una brújula sobre la superficie, permite establecer la
orientación de la piedra y del diseño que contiene.
Esta técnica fotográfica permite restituir a su posición
original una obra rupestre posteriormente sea girada, movida o trasladada.
Además permite simular la posible relación con eventos
astronómicos.
III Descripción
de 5 Casos
Cinco ejemplos ilustran la relación
entre obras rupestres, eventos astronómicos solares, accidentes
del paisaje y caminos indígenas. Los tres primeros son sitios
atribuibles a la Cultura Molle (Boccas et al 1999) y los
dos restantes a la cultura Diaguita (Guerra 2004) (Castillo 2004):
1) Cuz Cuz - Escala: En una
pequeña ladera a 5 mts. de la carretera a Illapel, se ubica
una escala de piedra actualmente muy derruida. Desde el petroglifo
1/1/3 en la cumbre de la escala se observa el horizonte en 360°.
Desde allí se aprecia lo siguiente: 1) Primer rayo del amanecer
del Solsticio de Invierno, en la foto el circulo muestra la posición
del petroglifo 2/3. 2) Punto de salida del sol en el Equinoccio.
El circulo muestra la posición del grupo de petroglifos 1/6.
3) Amanecer del Solsticio de Verano. El sol sale por la cumbre doble
6/2. 4) Ultimo rayo de sol en el Solsticio de Invierno visto desde
la escala, cae tras la piedra 1/4/1 . 5) Primer rayo de sol desde
tacita 1-4-1, tras el mismo cerro donde se observa salir el sol
desde la cumbre de la escala. 6) Grupo 1-2 de piedras tacitas, visto
desde la cumbre de la escala frente al petroglifo 1/1/3 hacia el
sur. El grupo se alinea con la cumbre visualmente más alta,
observada desde ese punto, aunque no la de cota efectivamente más
alta. (Bustamante 1991) (Boccas et al 1999) (Figura 1)
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Figura 1.
Observación astronómica desde la Escala, gráfico
de desplazamiento solar.
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2) Cuz Cuz - Quebrada Cavanilla
: En este lugar, ubicado en una quebrada al extremo oriente
de Cuz Cuz, existe un grupo de rocas semi derruido que conserva
aún una gran cantidad de petroglifos y dos troneras convergentes
(2/1/17 y 2/1/16) abiertas hacia el poniente. El último rayo
de sol en el atardecer del equinoccio, cae detrás de una
roca con forma natural de cráneo humano y sobre una pequeña
roca triangular. Penetra por las dos troneras simultáneamente,
hacia el interior de una pequeña caverna artificial, con
el techo actualmente derrumbado. Este rayo de sol que penetra por
ambas aberturas simultáneamente, permite hacer observaciones
con una precisión mayor que 1/2 °. Esto da una alta
precisión pues el sol en esa fecha se mueve 0,4° diariamente
(Bauer y Dearborn 1998) (Figura 2).
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Figura 2.
Cuz-Cuz. Atardecer de equinoccios. permite medir el año
trópico (365, 24219 días)
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3) Cuz Cuz - El Peral: En
esta quebrada ubicada 2 km. al norte de la escala de Cuz Cuz, una
pequeña piedra de 90 cm de largo, sobresale aproximadamente
10 cms. del suelo. Tiene forma de una punta de flecha, que apunta
a la cumbre más alta al sur oriente. En su superficie exhibe
un grabado que en la parte inferior representa un meandro con un
círculo sobre la curva de mayor tamaño a la derecha.
Este meandro parece representar las dos cumbres visibles al sur
oriente y el círculo coincide con la posición de salida
del sol en el solsticio de verano como muestra la foto superior
(Figura 3).
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Figura 3.
El peral. 1) amanecer del solsticio de verano. 2) Dibujo inferior
del petroglifo.
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4) El Mauro: En este sitio,
5 petroglifos exhiben dibujos descritos como pisadas de origen Diaguita,
por el arqueólogo Gastón Castillo (2004):
Sector 9, petroglifos 1, 2, 7. Sector 10, petroglifos 2 y 3. Estos
petroglifos están junto a caminos sub actuales y posiblemente
de origen arqueológico, que conectan El Mauro con Colliguay,
Potrero Alto y Tilama por el sur oeste y Cantarito y Chincolco por
el sur este. Ambos senderos confluyen en la Loma Paso del Carretero
y pasan junto a estos petroglifos en su descenso hacia el estero
Pupío. Estas huellas grabadas en piedra podrían estar
indicando la presencia de caminos, importantes por su función
de comunicar El Mauro descrito por Castillo (2004) como Tierra Fronteriza,
con los asentamientos más allá de las montañas
(Figura 4).
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Figura 4.
Petroglifos de huellas y rutas de acceso.
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5) El Coligüe: En este
sitio con presencia Molle y Diaguita investigado por la arqueóloga
Alejandra Guerra (Guerra 2004) en el Sector 6, petroglifos
61, 66 a, 66 b, 67 y 70. Muestran personajes a caballo, lo cual
indica que se trata de imágenes grabadas en tiempos históricos.
En el Sector 6 confluyen diversos senderos subactuales y posiblemente
arqueológicos, que conducen hacia Canela, a 6 horas a caballo
al sur poniente y hacia Quilitapia, a 6 horas al nororiente. Esta
relación jinetes-caminos, se ve confirmada en el Sector 2,
petroglifo 3, puesto que el sendero a Canela pasa junto a un petroglifo
con un personaje a caballo y una línea que parece representar
un sendero (Figura 5).
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Figura 5.
El coligüe. Petroglifos de jinetes y relación
con senderos.
|
IV DISCUSIÓN
Los antecedentes expuestos muestran
que las obras rupestres no pueden ser estudiadas en forma aislada
sino en relación a su entorno. Ellas deben ser entendidas
dentro de un sistema de coordenadas de tiempo y espacio. Las coordenadas
espaciales definen relaciones con: superficie de la roca en que
están grabadas, las otras obras, sitios habitacionales, restos
en el subsuelo, accidentes del paisaje, ecología y astronomía.
Las coordenadas temporales definen relaciones con: otros sitios
cercanos, contexto cultural, evolución histórica,
contactos interculturales, desplazamientos intersitios, etc.
La astronomía fue una herramienta
útil para satisfacer el requerimiento de humanizar el espacio
señalado por Criado (1991) y Jackson (2002) y para crear
calendarios. Esta función parece ser un nexo común
a todas las culturas. Por lo tanto podría ser una herramienta
que permita darle explicación y significado a determinadas
obras creadas por diferentes culturas precolombinas en diversas
épocas y latitudes. Esta noción se sustenta en lo
encontrado en diversos sitios arqueológicos de Chile, América
y el mundo por autores como: Krupp (1983), Broda (1991), Aveny (1991),
Liller (1996), Krupp (1997), Bauer y Dearborn (1998), Belmonte (1999:
259-278), Sprajk (2001), Bustamante (1991, 1996, 2003). Los trabajos
de estos autores, muestran que las obras rupestres tuvieron un sentido
astronómico, ritual, religioso, etc., pero, también
pudieron tener un sentido utilitario como indicar pasos y caminos.
Las obras rupestres para el ojo
inexperto, aparentemente están distribuidas al azar en un
determinado espacio. En muchos casos podrían ser complejos
instrumentos de observación astronómica, que siguen
funcionando después de 500 o 1000 años de ser abandonados
por sus constructores.
La construcción encontrada
en la Quebrada Cavanilla (figura 2) constituye un instrumento de
observación de alta precisión, que pudo haber permitido
a sus constructores aproximarse a la medición del año
trópico (365,24219 días), observando las pequeñas
variaciones en la posición en el horizonte del ultimo rayo
de sol en el equinoccio año tras año.
Los hallazgos realizados a la fecha
no permiten afirmar que tales mediciones hayan sido realizadas,
pero la existencia de este instrumento, indica que estaban en capacidad
de hacerlo.
La observación de eventos
solares durante el equinoccio fue una práctica extendida
en Amèrica. Bauer y Dearborn (1998) muestran observación
de equinoccios entre los Incas. William Liller (Liller 1996) señala
6 ahus con muros no paralelos a la costa con muros perpendiculares
al equinoccio. Una relación entre obras rupestres y observación
del equinoccio entre pueblos indígenas del noreste de México,
es documentada por Murray (2003). En Chile la observación
de la posición del sol durante el equinoccio ha sido descrita
en la escala de Cuz Cuz (Bustamante 1991) (Boccas et al, 1999) y
en el pasillo con orientación este oeste en el Pucará
de Chena (Bustamante 1996) (Boccas et al 1999). La orientación
de petroglifos en relación al equinoccio, no ha sido encontrada
por ahora por otros autores en otros sitios con presencia de la
cultura Molle.
La especial ubicación geográfica
de El Mauro (Castillo 2004) como cuenca muy cerrada con un solo
camino de acceso en la actualidad, la gran cantidad de sitios allí
encontrados (seelenfreund, 2001: 138) hace necesario realizar un
detallado estudio de los antiguos caminos de acceso en tiempos históricos
y en épocas precolombinas. También hace necesario
realizar estudios del entorno climático, pues la única
fuente de agua, el Estero Pupío, nace en este sitio y no
cuenta con afluentes desde la cordillera. Esto genera una gran dependencia
del clima local, limita la disponibilidad de este recurso y por
tanto genera un microclima que influye en la flora y fauna (Larrain
2003: 7) y en la capacidad de crecimiento poblacional en tiempos
prehispanicos.
La relación jinetes-senderos,
sugiere que los antiguos habitantes de El Coligüe pudieron
adoptar el motivo ecuestre para reemplazar el motivo huellas presente
en El Mauro, pero manteniendo el significado, es decir como señal
de rutas. La posible relación petroglifos-senderos fue señalada
por Jackson (2002) y Artigas (2004), pero, sin describir diseños
específicos asociados.
|
Figura 6.
Petroglifo y entorno. Fotografías laterales deben retratar
la obra y su entorno.
|
V CONCLUSIONES
Aquí se propone el uso del
concepto obras rupestres (petroglifos, tacitas, pictografías,
construcciones) en reemplazo del concepto arte rupestre,
pues estas manifestaciones culturales trascienden el contexto de
lo estético y autoral propio del arte occidental.
Las relaciones señaladas
entre obras rupestres y el contexto en que están insertas,
sugieren la necesidad de introducir el concepto Entorno en
el estudio de los sitios arqueológicos. El concepto Entorno
abarca: a) Las obras (petroglifos, tacitas, pictografías,
construcciones). b) El entorno cultural es decir todas las manifestaciones
superficiales y en el subsuelo, asentamientos cercanos, etc. c)
El entorno geográfico que incluye los accidentes del paisaje,
la línea del horizonte circundante. d) El entorno astronómico
(transito aparente de cuerpos celestes, sol, luna, estrellas, constelaciones
y planetas). e) El entorno ecológico (clima, hidrografía,
flora y fauna, que define la carga máxima de habitantes).
El concepto Entorno, satisface la necesidad de realizar estudios
multidisciplinarios que incluyan las variables descritas (Larrain
2003)(figura 7).
|
Figura 7.Obras
rupestres y Entorno.
|
La relación Obras Rupestres
- Entorno, señala que, girar, mover o trasladar las obras
de su emplazamiento original, modifica datos relevantes, que impide
establecer posibles relaciones y no permite la interpretación
de las obras rupestres.
La aplicación de este
nuevo enfoque multidisciplinario, es necesaria especialmente en
sitios que serán permanentemente alterados debido a obras
mineras, crecimiento poblacional, labores agrícolas, etc.
¿Preguntas,
comentarios? escriba a: rupestreweb@yahoogroups.com
Cómo
citar este artículo:
Bustamante,
Patricio.
Entorno:
obras rupestres, paisaje y astronomía en El Choapa, Chile.
En
Rupestreweb, https://rupestreweb.tripod.com/elmauro.html
2005
Agradecimientos
A mi esposa Angélica por
su infinita paciencia, a Pancho y Christiane, a la familia Ordenes,
a los alumnos del taller Sangatai de arqueoastronomía, a
Alejandra Guerra, a todos los hombres, mujeres, niños y niñas
que anónimamente y con generosidad han aportado para el desarrollo
de esta investigación. A los antepasados que nos legaron
estos invaluables tesoros. A la generosa madre tierra, que sustenta
nuestra existencia y sufre nuestros agravios.
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el camino a la costa: Disposición del arte rupestre y uso
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de Taller de Arqueología de la Provincia del Choapa.
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